Michi

El Maestro Jesús López Vega, inauguró su más reciente mural en el Centro Cultural Axixic, el 25 de Julio. El monumental trabajo se titula "EL Nacimiento de Michis" y es una representación pictórica de el más conocido mito en la ribera de Chapala, el de Michicihualli, la deidad mujer-pez. Participé en la mesa del presidium junto al maestro Jesús, Francisco Barreda, Benito Zamora, Alejandro Martínez, Manuel Flores y otro más. Gracias Jesús por el hermoso trabajo que nos regalaste a todos. Después de las fotos encontrarán la lectura con la que compartí la invitación del maestro Jesús López Vega.

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En la inauguración

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El resto de la mesa y Moy Ramírez tocando al fondo.

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Los asistentes

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Con Jesús López Vega y Manuel Flores

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Jesús Victoriano López Vega

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Por la calidad de los murales en los espacios públicos, puede medirse la cultura de un pueblo. Las artes, como todos sabemos, no son sólo el tan nombrado alimento para el alma, sino que también se constituyen como un claro referente para conocer el momento que un pueblo se encuentra viviendo. El enfoque que una sociedad le da a las manifestaciones de las bellas artes nos sirve para detallar el lugar preciso en que ésta se encuentra en el marco de lo histórico. Porque el arte es el lenguaje que se habla en los trasfondos humanos y sociales. Sus formas no son sino titánicos esfuerzos por reproducir la impresión que el creador tiene de la realidad e incluso de lo que acontece algunos metros más allá. A través de cómo un pueblo plasma su cultura conocemos todos los pormenores de su evolución, nos acercamos a los intersticios de su identidad colectiva, de su pensamiento, de esas pasiones que moldean, en el día a día, su compleja sociografía, y en el más de las ocasiones, nos asomamos a sus humanas debilidades e inclinaciones.

El acto que esta tarde nos reúne, nos servirá como ejemplo. A través de los finos trazos del maestro Jesús Victoriano López Vega, logramos descifrar las macropinceladas todas, del mágico pueblo de Ajijic. Encontraremos, cada quien a su modo, distintas facciones de un rostro mismo, el de la manifestación artística y cultural de aquí.

La cultura pues, no es sólo alimento de cada día, ni fertilizante de lo porvenir, también es un acucioso registro, un profundo petroglifo, un manuscrito perdido y después encontrado en la cromada botella del futuro, que nos hablará de quiénes fuimos y nos deberá recordar constantemente la ruta que nosotros mismos nos hemos trazado y que deberemos seguir hasta al final. Gracias maestro por este regalo a nuestra posteridad. Felicidades Chuy. Gracias.